La granada es una fruta otoñal, muy típica en algunas zonas en Navidad, con un sabor muy agradable y una cantidad sorprendente de beneficios para la salud. Es una fruta rica en vitamina C y del complejo B, calcio, magnesio, ácido cítrico y málico, taninos y sobre todo potasio. Es buena para suavizar los dolores de garganta, para prevenir catarros y proteger unos cuantos órganos internos.
La granada tiene un problema que es importante tener en cuenta, si mancha un tejido lo hace para siempre. Si pones a los niños a pelarla, ponles un baby, un delantal o ropa que no te importe que se manche. Escoge las de color más vivo con matices marrones y sin cortes o magulladuras. Para desgranarla lo más sencillo, al menos para mi, es cortarla por la mitad, apretarlos un poquito y darle golpecitos en la piel con una cuchara. Los granos van cayendo solos al recipiente.
La granada como casi todas las frutas, se puede comer directamente al natural. También hace una buena combinación con ensalada de lechuga o escarola, poniendo algo de color y haciéndola más atractiva para los niños. Lo que suele gustarles mucho es el zumo, la granadina. Se puede hacer exprimiendo la granada como si fuera una naranja y después colándolo para que no pasen las semillas. Con la batidora tienes que hacerlo muy despacio para lo mismo, que no se trituren las semillas, y después se cuela.
En Recetas para niños proponen un delicioso helado de granada con arándanos. Buscaremos más recetas interesantes para los niños y las compartiremos.
fuente
No hay comentarios:
Publicar un comentario