BEOWULF

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Antiguo poema germánico

En un lago de Dinamarca vivía un monstruo llamado Grendel. De noche devastaba el palacio real de Hrogar, rey de los daneses, devorando a sus súbditos.

De una tierra lejana llegó en su ayuda el héroe Beowulf, que se apretó al desafío con serenidad:

-¡La suerte está echada!

Beowulf le tendió una trampa al monstruo en el palacio:

emepzó una tremenda lucha en la que Beowulf consiguió arrancarle un brazo. El monstruo derrotado, desapareció en el lago. El héroe Beowulf partió, aclamado por todo el mundo.

Pero ¡le llegó la noticia de que la madre del monstruo Grendel había llegado al palacio para vengarse!

Entonces Beowulf volvió al palacio y persiguió a la madre de Grendel hasta el lago, donde se sumergió en sus aguas color sangre ¡En una caverna bajo el agua combatió contra la madre de Grendel y con una espada mágica le cortó la cabeza! Beowulf, cansado pero vistorioso, volvió a su tierra, donde lo proclamaron rey.

Pasaron cincuenta años.

Tambien en el reino de Beowulf vivía un monstruo, un dragón que custodiaba un magnifico tesoro, y también un buen día, empezó a arrasar aldeas y campos...

El viejo Beowulf, a la sazón anciano, se enfrentó valientemente al dragón, acompañado de su fiel amigo Wiglaf.

Fue una lucha tremenda. Beowulf aunque mortalmente herido por el veneno del dragón, hizo acopio de todas sus fuerzas y combatiendo valerosamente consiguió...